Wednesday 16 February 2011

Ser una roca y no rodar. Entrevista exclusiva a Grafite de The South American Football Show.


Ni las actuaciones de Grafite, el hambriento anotador del Wolfsburg, pudieron evitar la salida del técnico Steve McLaren. En esta entrevista exclusiva, el internacional brasilero le cuenta a The South American Football Show cómo aprovechar a Edin Dzeko al máximo, lo que viene para Neymar, y cómo ve al fútbol en su país.

Luego de una seguidilla de resultados pobres, Steve McLaren fue separado de la dirección técnica del Wolfsburg, ¿qué impresión te dejaron sus técnicas?
Debo decir que en Steve encontré a un buen entrenador, un hombre que sabe bastante sobre el juego y un buen profesor. Infortunadamente los resultados simplemente no llegaron, y esta es la medida bajo la cual es juzgado un entrenador. Steve siempre tuvo gran confianza en mí, me respetó y me apoyó cuando lo necesité.

En tu carrera has disfrutado de asociaciones prolíficas, notablemente tanto al lado de Edin Dzeko en Wolfsburg de Alemania, como al lado de Dimba y Araujo en Goias de Brasil, ¿cuál es la clave para desarrollar estas asociaciones?
Antes que nada, para empezar algo hay que contar con un grupo de buenos jugadores. Cuando el grupo está establecido es importante intercambiar ideas. Se debe asimilar la manera en que el compañero piensa y lo que le gusta hacer en el campo. Las mejores relaciones van más allá del campo porque hablar es tan importante como jugar juntos. este es el mayor secreto detrás de las buenas duplas o tripletas en un equipo.

Temprano en tu carrera jugaste en unos cuantos clubes de Brasil y también pasaste un rato en Corea del Sur, ¿dudaste en algún momento de tus habilidades?
Es común para un jugador joven en Brasil moverse de un club a otro en búsqueda de un lugar en el que se sienta cómodo. Muchos clubes van detrás del remedio rápido, pues compran profesionales establecidos y no dan mayor chance a los juveniles. Esto no sólo sucede en la primera división, sucede en todas las divisiones menores. Hacerse un lugar, establecerse, es de las cosas más difíciles que un jugador logrará en su carrera y requiere un gran nivel de dedicación.

Viajaste con Brasil a la Copa del Mundo en Sudáfrica, ¿cómo pretendes ganarte un lugar en el equipo del 2014?
No puedo hacer mucho más aparte de seguir trabajando duro en mi club. De mí depende que mis esfuerzos sean notados por la selección nacional y me representen ser llamado. Antes de la última Copa del Mundo, tuve 15 minutos para impresionar, y en ese corto tiempo logré persuadir a Dunga de llevarme a Sudáfrica. Espero tener más tiempo que ese para probarle mi valía a Mano Menezes. La próxima copa se llevará acabo en Brasil, y es difícil poner en palabras lo que esto representa para mi país. El amor por el fútbol en Brasil es sobrecogedor, y todo el mundo reconoce la importancia de recibir el mayor evento que nuestro deporte ofrece. Las expectativas depositadas sobre equipo brasilero para redimir las fallas de 1950 son desde ya aparentes, y hay enorme ansiedad en el país esperando que el equipo venza el pasado y gane la Copa Mundial en Brasil.

Estuviste en la Copa del Mundo, pero también jugaste en la Champions League, ¿cómo se sintió anotar tres goles en tu debut?
La Champions League es una competencia muy especial y anotar tres goles en mi primer partido es una memoria que disfruto. Estaba muy nervioso la noche antes del partido, y apenas pude dormir porque pensaba mucho en cómo quería jugar. La Champions League es un torneo que motiva de manera extra a cualquier jugador que compite; jugar contra los mejores del mundo es, personalmente, un placer.

¿Qué tal es tu relación con los otros sudamericanos en Wolfsburg, como con Diego?
Tengo una relación muy buena con todos. Siempre estamos juntos, y pasamos el tiempo divirtiéndonos en la casa de cada cual. El nivel de amistad que tenemos muestra lo importantes que somos para el otro. Tener rostros familiares alrededor ayuda a los jugadores que vienen del extranjero a adaptarse rápidamente. Eso sí, infortunadamente debo decir que ninguno de los brasileros que tenemos en Wolfsburg mantienen la tradición de buen canto y buen baile.

¿Qué esperas del joven venezolano Yohandry Orozco?
Orozco es un talento muy prometedor y esperamos ayudarle a desarrollar su juego aquí en wolfsburg. No sé qué idiomas hable aparte del Español, pero estaremos hablandole para asegurarnos de que se sienta como en casa. Es mi trabajo, y el de otros sudamericanos, ayudarle a adaptarse a la vida en Alemania tan rápido como sea posible. Entre más rápido se adapte, más rápido veremos lo mejor de él en el terreno.

Las actuaciones de Neymar en Santos lo han transformado en la propiedad caliente del fútbol en Brasil este momento, sin emabrgo las especulaciones de un traspaso se han enfriado. ¿Qué consejo le darías a Neymar?
No tengo duda de la importancia de que ciertos jugadores maduren antes de venir a Europa. Muy seguido, jugadores vienen muy temprano y encuentran problemas de adaptación en sus vidas. La situación en Brasil también parece estar cambiando para permitir que los jóvenes se mantengan un rato mayor. Estos días, los clubes dan mucha atención a sus promesas: trabajan con sus familias, les dan consejos sobre marketing y se aseguran de no quemarlas con muchos juegos seguidos. Por otro lado, el clima financiero en Brasil está cambiando, y esto hace que quedarse en Brasil sea más atractivo para los jugadores.

Este año Ronaldinho y Rivaldo están jugando en Brasil. ¿Es esta una muestra de que la liga se está fortaleciendo?
De lo que he visto, ha habido una creciente inversión. Los clubes tienen ahora más dinero que nunca para atraer grandes jugadores y pagarles un sueldo competitivo. Esto significa que dos cosas están sucediendo: los jugadores juegan más en casa antes de partir, y más jugadores está regresando a casa. Aparte, no sólo tenemos buenos jugadores brasileños jugando en Brasil, la liga está atrayendo a lo mejor de Sudamérica. Todo se reduce a cambios de actitud, el negocio del fútbol es ahora reconocido seriamente en Brasil.